¿Qué tal si abordas la máquina del tiempo al 1998? ¿Recuerdas haber llegado temprano a la escuela con tu Gameboy bien escondido en la mochila? ¿Los intercambios de tu Blastoise por mi Charizard a través del Link Cable? ¿Las peleas épicas a la hora del recreo y todos los panas alrededor viendo quién le daba la pela a quién? Bueno, te diré algo, han pasado ya más de 15 años desde esa fiebre que muchos han vivido.
Allá para septiembre del ’98 fue que se pasó por televisión el primer episodio de esa nueva serie de “muñequitos” que pocas personas pensaron que llegaría tan lejos. El punto es que varias semanas más tarde, llegaron las primeras copias a las tiendas de aquella serie, Pokémon Red y Pókemon Blue a gastar cientos de baterías AA.
Pokémon Red y Blue no estaban lejos de ser juegos perfectos, quizá una que otra falla técnica pero nada más y a nadie le importaba. Creo que el único glitch notable y que alegró a todo el mundo fue el de MissingNo.; y sé honesto, abusaste hasta la saciedad de Rare Candies y Master Balls; todos lo hicimos. De hecho, más adelante, conseguir un Gameboy Color y poner tu copia en él, hacía que todo el juego se tornara el color de la versión correspondiente y esto lo hacía aún más cool.
Un main quest que te hacía batallar con ocho líderes de Gym que servían como bosses además de la Pokémon League (Los entrenadores más fuertes del juego) además de escoger tu primer Pokémon conocido como el starter y la meta de atrapar todos los Pokémon después de terminarlo era básicamente la estructura de ambas copias – y hasta cierto punto lo sigue siendo hasta el día de hoy – pero había un pequeño detalle: era imposible alcanzar esta meta con solamente una de las versiones. Ahí es donde entra la magia y el dinamismo de la serie: intercambiar con aquel pana que tenía la versión Blue y le intercambiaste un Ekans por un Vulpix que era exclusivo de su versión. Más allá de eso, poder pelear con tus panas a ver cuál era el mejor trainer, hacía la experiencia aún más divertida.
Ya se hablaba de generaciones de Pokémon y estabas en la segunda. Aún así: hubo un elemento que predominó entre todos los Pokefreaks de la época: la nostalgia. Es por esto que para sorpresa de muchos, luego de vencer a la Pokémon League de la nueva región (Johto), se te otorgaba un pasaje a Kanto, la región de la generación pasada. No tan sólo eso, sino que luego de volver a vencer a los Gym Leaders y ver muchas de las caras familiares, te encuentras con el verdadero final del juego: una batalla contra Red, el protagonistea de la generación anterior.
Luego llegó la versión Crystal que hacía más o menos la misma función que la Yellow en la generación anterior, sólo que esta vez se encargó de hacerle algunos cambios a lo que a había venido en las versiones Gold y Silver. Ahora bien, quizá el elemento más importante que hizo debut en la versión Crystal fue el hecho de poder elegir el género del personaje al principio del juego. Muchos de los detalles que tenemos hoy día en la serie de Pokémon debutaron en esta segunda generación que sin duda alguna fue la más anticipada y por algunos gamers como la mejor de todas las generaciones.
No fué hasta más o menos dos años más tarde que veríamos una nueva generación y nuevos cambios a la serie con la que muchos crecieron. Así que pendiente a este próximo jueves para que leas la segunda parte de esta reseña de tres partes. Recuerda que puedes seguirme en Twitter: @Six_figs para que estés al tanto de todo lo el contenido de Yo soy un Gamer ¡Vamo’ Arriba!